Tatiana Samper es nuestro personaje del mes
Tatiana se graduó en 1997 del colegio. Estudió Biología en la Universidad de Los Andes y antes de graduarse vivió en la selva por casi 2 años: la Sierra de la Macarena, la Serranía de Chiribiquete , el Amazonas y también en una reserva natural al sur de Arizona en Estados Unidos.
Al graduarse de la universidad, montó un proyecto mientras viajaba por Suramérica llamado “Colombia la última frontera”, el
cual buscaba, en un momento de mucha violencia en Colombia, atraer turistas a nuestro país y mostrarles otra cara. Tatiana ha sido profesora del colegio Tilatá, conferencista y escritora de Volviendo al origen: la vida como punto de encuentro, facilitadora de Biodanza y procesos humanos, de Temazcales (una ceremonia muy antigua de las tradiciones nativas de Norte América) así como cantante y compositora del proyecto musical pedagógico Un Bosque EnCantado . Actualmente está comenzando una nueva banda musical para adultos llamada Tatiana Samper y Los amigos del Misterio con la que busca transmitir mensajes que abran la conciencia y el amor por la vida. Es mamá de Mayna, Fuerza de vida. Una hermosa niña de 10 años.
Quisimos que nos contara un poco más de su campo de trabajo, así como de sus diferentes proyectos y esto fue lo que nos dijo:
¿Qué es Volver al Origen?
VolVer al Origen: la vida como punto de encuentro es una visión de vida que recoge mis aprendizajes en medio de la selva y el desierto, de momentos compartidos con diferentes indígenas cerca al fuego, de ceremonias ancestrales como los Temazcales, con las plantas de poder, los círculos de mujeres, las danzas de la luna, de momentos y espacios donde he encontrado una unión muy profunda con la Tierra, con el origen. Para mi la palabra volver es volver a ver.
Una visión que se volvió un proyecto de vida que se manifiesta de diferentes maneras desde el 2005: conferencias, música, cuentos, viajes, encuentros…
Tomó forma concreta un día que le pregunté a algunos niños pequeños del Colegio donde trabajaba: ¿de dónde viene la leche? y me respondieron de “Carulla, el Éxito, Pomona”, no había conexión con el origen de la vida: con la vaca, el pasto, la tierra el agua… ¿entonces cómo vamos a cuidar la vida si no la vemos? Era un momento donde estaban secuestrando mucho en Colombia y los niños estaban muy aislados del campo. Comenzó siendo una conferencia que di un 22 de marzo en honor al día del agua. Luego esa conferencia tomó vuelo propio y hoy en día más de 5000 personas de colegios, universidades y empresas de diferentes partes de Colombia la han escuchado. Es una conferencia que abre la conciencia y nos conecta con la vida.
A partir de una canción que escuche en un temazcal de la comunidad Muisca de Sesquilé de los 4 elementos “Tierra mi cuerpo, agua mi sangre, aire mi aliento y fuego mi espíritu” hago un viaje para recordar que todos somos parte de este Gran Organismo que es la Tierra o Pacha Mama como le dicen algunos indígenas, somos sus células y hacemos parte de un gran tejido del cual dependemos. Me interesa generar conciencia sobre qué le vamos a dejar a las próximas generaciones, y compartir experiencias donde ya estamos haciendo una transición hacia una vida más sustentable como son las Ecoaldeas. Un lugar donde los humanos estamos encontrando maneras más orgánicas y amorosas de habitar nuestra Tierra y compartir con todos los seres vivos con los que coexistimos.
Esta visión se ha manifestado también en cuentos y canciones y en todo lo que hago, la siento como un espíritu que me acompaña siempre llevando un mensaje en lo que sea que haga, cantar, bailar, hablar…
¿Qué beneficios tiene la Biodanza para las personas que la practican?
La Biodanza es una herramienta muy poderosa de transformación humana a través de la danza, la música y el encuentro con uno mismo y los otros. A través de esta técnica creada en 1958 por Rolando Toro, un humanista Chileno, los seres humanos despertamos nuestros potenciales de creatividad, vitalidad, afectividad, sexualidad y trascendencia, encontrando muchos dones en nosotros, que han sido opacados por la sociedad y por la manera en que está planteada la educación donde nos llenan de información y no dan mucho espacio para que ofrezcamos al mundo lo que traemos de nuestro origen. Todos estamos llenos de sorpresas y dones.
En Biodanza encontramos libertad de expresión de nuestro ser real.
Yo personalmente comencé a componer canciones y a cantar cuando me estaba formando como facilitadora de Biodanza en la Escuela de Bogotá. La Biodanza tiene como punto de partida y de llegada, la Educación Biocéntrica que busca que todo gire en torno al cuidado de la vida, esa es nuestra naturaleza real, otra vez Volver al origen…
¿Cómo nace el proyecto de un Bosque EnCantado?
Uno en la vida se encuentra con las personas con las que se tiene que encontrar para crear proyectos que van más allá de lo que hemos soñado, como misiones de vida. En el 2009 conocí A Camila Rivera y Daniel Roa, mis socios del Colectivo Animal (Creadores de UnBosque EnCantado), en circunstancias muy divertidas y extrañas donde Mayna mi hija fue el punto de encuentro. Cuando nos conocimos, tuvimos una resonancia profunda en la necesidad de hacer música para los niños que le gustara también a los papás. Soñamos con transmitir mensajes profundos de conexión a la vida, con unir las familias a través de la música y con generar una pedagogía afectiva que vinculara a las familias con la Tierra y con nuestros hermanos los animales. Siempre hemos sabido que los niños son los grandes mensajeros del cambio que necesitamos dar como humanidad para volver al origen.
Camila había compuesto la canción de Canta Ranita, inspirada en las “Cartas de Medicina”, un Tarot con la sabiduría de los indígenas Lakota (nativos de Norte América) y otras ideas de canciones de animales que habían surgido en compañía Daniel utilizando estas mismas cartas. Así decidimos usar las cartas como inspiración de la sabiduría ancestral y los animales como mensajeros antiguos de valores que necesitamos recordar como humanidad para vivir mejor. Nos reuníamos una vez por semana, sacábamos una carta, nos inspirábamos y hacíamos una canción. La esposa de Daniel, Alejandra Álvarez, estaba embarazada y participo en algunas canciones. Grabamos en un estudio casero en la casa de Daniel y Alejandra, para las 9 canciones invitamos a 35 músicos (entre esos Nicolás Ospina y Natalia Abello otros exalumnos) a ser parte de este sueño.
El disco nos ha llevado cantar en escenarios como El Teatro Nacional, el Jorge Eliecer Gaitán, El Julio Mario Santo Domingo, ha sido una sorpresa estar en esos escenarios.
En escena somos 6 músicos.
Con el Colectivo Animal, también hacemos talleres de composición colectiva con niños y músicos regionales, como la canción para la Paz que fue la canción de la Navidad de EPM en Medellín en el 2015 que se proyectó en la Catedral Central durante todo diciembre. Las últimas canciones que hicimos son para un proyecto educativo llamado Félix y Susana de la Fundación Sura, en unión con la Revista Semana.
Ahora estamos por terminar Un Bosque EnCantado Volumen 2, con nuevos animales contando sus historias. Pronto lanzaremos el crowdfounding para financiarlo.
Sabemos que también cantas otro tipo de canciones además de música infantil ¿Nos quieres contar un poco sobre lo que te inspira para cantar?
Sí, tengo otros proyectos musicales como solista. El año pasado lancé mi banda “Tatiana Samper y Los Amigos del Misterio” en el Festival de Luz y Armonía y ahora en marzo voy a la ciudad de Pasto al Encuentro Voz de vida a cantar por los Derechos de la Madre Tierra y Los derechos de la Mujer. Me inspira la vida, la creación que es este universo, la tierra que es nuestra casa cósmica de la cual me enamoré profundamente cuando estudié Biología y viví en la selva y en los desiertos de Arizona. Me inspiran los indígenas y su sabiduría, los nativos de todas partes del mundo que guardan el conocimiento y el amor hacia la vida y la conexión espiritual de las diferentes tradiciones, los puntos de encuentro, lo espiritual.
Me inspira ver a la gente unida, danzando y cantando, celebrando la vida. Muchas canciones han nacido en eventos como El Llamado de la Montaña o las danzas de la luna, espacios donde muchas personas nos reunimos con el propósito común de recordar que somos una gran familia de la Tierra.
Para mí la Tierra es una Gran obra de arte de Dios, del Amor, del Gran Espíritu como le digo yo… y nosotros somos parte de ella. Creo que como humanidad tenemos una responsabilidad muy grande de cambiar nuestras maneras de vivir sobre ella, de tratarnos entre nosotros reencontrando maneras amorosas y respetuosas donde entendamos que cada uno tiene su lugar sagrado en el mundo y que en vez de competir debemos compartir y buscar la inteligencia colectiva. Es volver a recuperar la espiritualidad y dejar tanto el materialismo en el que estamos viviendo actualmente.
Volver a la unidad, al origen.
Mi música busca recordar lo esencial y ser un puente de conexión a lo importante que permanece y perdura para todas las generaciones y para todas las formas de vida. El agua, por ejemplo, tengo varias canciones que hablan de ella como Sinfonía Universal. También a nuestra naturaleza amorosa y cuidadosa que sabe amar y recuerda lo esencial.
Ahora te invitamos a responder rápidamente estas preguntas que hacemos a nuestros invitados como personaje del mes:
¿Cuál es tu palabra favorita?
Origen
¿Cuál es la que menos te gusta?
Odio
¿Cuál es el sonido que más recuerdas del colegio?
La campana del colegio antiguo cuando quedaba en suba
¿Cuál es olor que más recuerdas del colegio?
El de pan a la plancha en la cafetería.
¿El profesor/a que más recuerdas?
Libardo, un profesor que a través de la educación física me enseñó cosas muy importantes para la vida.
¿Cuál fue tu materia favorita?
Atletismo, arte y filosofía con Hans.
¿Quiénes eran tus mejores amigos?
Juan Andrés Ospina, Martin Contreras, Santiago Aparicio, Juliana Posada, María Margarita Navarro, María Alejandra Bermúdez
¿Cuál era tu lugar preferido en el colegio?
La cancha de football donde entrenaba atletismo.
¿Qué te ves haciendo en unos años?
Me veo viviendo en una EcoAldea en la Sierra Nevada de Santa Marta al lado del agua limpia, cantando, bailando, meditando, amando, sembrando la tierra, corriendo temazcales y viajando por muchos lugares ayudando a despertar la conciencia.
¿A quién te gustaría ver cómo personaje del mes?
A Juan Andrés Ospina o a mi hermano Mateo Samper.
